Aunque había algunas de las principales celebridades en la fiesta de esa noche, Yi Jinli no era inferior a ninguna de esas celebridades masculinas de categoría A. De hecho, él era aún más sorprendente que ellos.

Él tenía un rostro hermoso, y cuando miraba a las personas con esos ojos encantadores y amorosos, los periodistas no podían evitar enamorarse de él. Él era demasiado hermoso para describirlo. Su belleza era del tipo que podía atraer tanto a hombres como a mujeres.

Sin embargo, cuando estos ojos estaban fríos, le daba a las personas una tensión indescriptible.

Yi Jinli, ahora con los ojos medio caídos, estaba rodeado por sus propios guardaespaldas, así como los guardias de seguridad del lugar. Su cuerpo largo y delgado estaba envuelto en un traje negro bien hecho a medida, lo que hacía que su figura pareciera extremadamente bien proporcionada. Había un aire de elegancia en todo él.

Sin embargo, hoy hubo excepciones.

Todo lo demás estaba bien, pero... él llevaba una bufanda