'Ella está asustada. ¿La asusté?’.

Él quería asustarla para darle una lección y mostrarle su amabilidad. Solo quería que ella supiera lo que le pasaría si él realmente le estuviera faltando al respeto.

Sin embargo, cuando la vio en este estado, sintió un terrible dolor en el pecho. ¡Era como si se estuviera castigando a sí mismo!

Él levantó la mano y secó suavemente las lágrimas de su rostro. "Está bien, no te forzaré. Ni ahora, ni nunca".

Ella lo miró sin comprender, como si no pudiera creer que él estaba diciendo tal cosa.

Ella no esperaba llorar tanto de repente. Se había dicho a sí misma que incluso si era ‘violada’, no tenía por qué tomárselo en serio. ¡Ella pensaría en ello como una parálisis del sueño!

Sin embargo... Cuando estaba atrapada en una situación que no podía evitar, recordaba su época en la cárcel. Era lo mismo en ese entonces. Era como si no importara cuánto luchaba, el dolor infligido sobre ella no disminuiría.

Era como si ella no fuera una humana a los ojos