Capítulo 6

PDV: Claire

Tras haber terminado el almuerzo que pensé por unos instantes que compartiría con ese antipático finalizo en un amargo acuerdo que él solo pensarlo me causaba  un poco de incomodidad por lo embarazoso del asunto.

De manera extraña al haber llegado donde se debía continuar la sesión fotográfica,  Dominic fue llamado a parte para hablar con el encargado  de todo allí, por mi parte me situé en un cómodo lugar mientras aguardaba, en ello recordé que no traía conmigo el maletín de maquillaje que debía  llevar a donde fuera, de esa forma empecé a buscarlo con desespero, tenía presente que de perderlo estaría en líos.

El buscar y no poder encontrarlo me impacientaba, de esa forma escuchaba el murmullo de algunas empleadas allí presentes.

—¿De veras Dominic dijo eso?

—Desde luego, por esa razón Terrence está molesto, dijo que le importa poco el pago  que acordaron por su trabajo, si Dominic no se disculpa no se sabe que podría ocurrir.

—Aun no comprendo porque enfadarse con Terrence, se supone que es gay ¿no? ¿Porque molestarse si él quería algo con su maquillista?

El descubrir un suceso que desconocía, en especial de esa magnitud me llenaba de dudas, ¿qué habría ocurrido exactamente, porque yo estaba implicada sin saberlo?

Cuestionando esas interrogantes que no dejaría sin resolver inquirí al respecto.

—Perdonen, escuche un poco lo que hablaban y me parece que lo que comunicaban tenía que ver conmigo.

—¡Oh lo siento! debemos retirarnos.

—¡No! por favor aguarden, quisiera saber qué fue lo que ocurrió, escuche que dijeron la maquillista de Dominic y hasta donde tengo entendido yo soy su maquillista.

—Lo sentimos linda, tendrás que averiguarlo de otra manera, no queremos problemas con Dominic Andressen—de esa forma poco amable desde mi perspectiva ambas se retiraron a otra zona del lugar, tal parecía que lo que mi hermana me había dicho de la empatía era cierto, aun siendo una maquillista más el trato no era el adecuado.

Debido a mi manera de ser esa curiosidad me inquietaba, no obstante, también lo hacía el hecho de ubicar el maletín, con ello pensé rápidamente y al poco tiempo pude encontrarlo, recordé que  lo había ubicado en el set que era estipulado para Dominic. Estando allí un sujeto venia hacia mi tal parecía que era el fotógrafo que estaba a cargo de las tomas, lo extraño era que traía consigo su equipo como si el trabajo hubiese acabado…

PDV: Dominic

De manera poco agradable desde mi punto de vista fui conducido por Roger, el cual lucía una expresión de irritabilidad que no me agradaba.

—Dominic, estás aquí porque firmaste  un contrato, accediste en ser la imagen para el perfume que se estará promocionando en poco tiempo y ahora surge esto de imprevisto. No me parece profesional de tu parte.

—Para empezar quiero entender porque alegas fervientemente ese comentario sobre mí, sabes perfectamente que soy un profesional, he caminado en la pasarela para muchos diseñadores, aparte de las campañas y las grandes editoriales de moda en las que he estado.

—Se cada paso que has dado y por eso nos  interesamos en ti, lo que ocurre es que el  fotógrafo con el que solemos trabajar no está de acuerdo en ser tratado como lo hiciste.

—Le di el trato que se merece—dije para tomar asiento sin sentir el mínimo remordimiento por mis actos, tenía presente que lo que  dije estuvo bien y no cambiaría de parecer.  

—Pues debes remediarlo, nos dieron un plazo para esas tomas  y de no tenerlas hoy deberás permanecer en la zona, no podrás marcharte.

—Por mí no hay problema, no pretendo remediar nada, yo soy la estrella no el, asi como tipejos como ese que contrataste hay más que darían un mejor servicio.

—Qué testarudo me saliste, no termino de comprender porque comportarte de esa forma por un simple comentario hacia tu maquillista.

—Tengo mis razones Roger y no hablaré de ello. Si no tienes algo más que agregar me retiro.

—¡Espera! En vista de que no podré contar con los servicios de Terrence haremos como indique, te corresponderá quedarte en la zona hasta que mañana a primera hora resolvamos este asunto.

—Eso espero, tengo trabajo pendiente en Nueva York con otra marca y no pretendo quedar mal.

—Hare lo que esté a mi alcance, por los momentos tienes la tarde y noche libre para que  disfrutes del lugar.

Con esas palabras  salí del espacio donde nos encontrábamos.  El fijar  la vista hacia mi empleada comprobaba que esa persona con la que había tenido roces antiguamente se encontraba con ella. De un modo sin explicación aparente me dirigí hacia donde estaban.

—Sol, es hora de retirarnos la sesión continuará mañana.

—¿Mañana? Pero…

—Ya dije que mañana y acate lo que dije.

—No deberías de tratar a tu personal asi, aun no entiendo como una lindura  como ella te soporta.

—Ignorare tu tonto comentario Terrence, no pretendo tener más problemas con Roger por tu causa.

—¿Mi causa? Eres alguien engreído y sin un gramo de modestia con el resto, te crees superior y con potestad de pisotear, tal como haces con ella, por esa razón no pretendo seguir laborando en este proyecto.

—Me da igual, como tú hay más y con el doble de  capacitación que la que dices tener.

Como si le enfadara lo que dije se aproximó hacia mí, admirándome con un enojo que era evidente.

—Suelo llevarme bien con todos, pero tú Dominic Andressen eres alguien que no merece la pena—con esas palabras giró la vista hacia mi empleada, a la cual sonrió para luego referir esas palabras que me irritaban—. Estaré todavía por aquí, si aceptas lo que te propuse podríamos concretar la cita como acordamos.

Tras su partida no espere mucho para actuar como lo hice, sujetándola del brazo la atraje hacia mi para saber en que habían quedado exactamente.

—¿Que se supone que acordaron? ¿Olvidas nuestro acuerdo?

—¿Qué te ocurre? Para ser gay no eres nada gentil y delicado.

—Mi preferencia sexual no tiene nada que ver en la manera en la que trato al resto, además, no has contestado mi pregunta.

—El fotógrafo de nombre Terrence muy gentil me propuso salir y pasar un rato agradable junto a él.

—Por lo que veo aun insiste el muy idiota.

—¿De qué hablas?—inquirí para soltarme de su agarre.

—No es tu asunto y descarta esa propuesta, no iras a ninguna parte con él.  En vista de que la sesión se suspendió y el resto de las tomas serán para mañana tenemos el resto del día libre, asi que vamos andando.

—Siendo asi no lo entiendo, ¿a dónde iremos?

—A diversos lugares por una mejor vestimenta y también a solventar tu problema con ese cabello que tienes.

—¿Qué tiene de malo mi cabello? Me agrada.

—Veo que sigues ganándote los méritos para ser despedida al no obedecer mis normas,  por ello me parece prudente que haga una escala  para cada vez que no acates—admirando su expresión de confusión me propuse en explicarle, en especial ahora que mantendríamos un acuerdo en el que ella también saldría beneficiada— . De acuerdo a la relación falsa que mantendremos cada acción que hagas  y norma que acates tendrá una bonificación que iré estipulando para al finalizar el resultado sea  como lo indique, sin embargo, asi como hare eso de a poco cada una irá bajando si veo que no obedeces como lo indico, me agrada que me sirvan como debe de ser  y si no lo hacen como quiero sencillamente me veré en la obligación  de llevar a cabo el despido y la sanción que comente en el restaurant.

Observando la  manera   en la que me miraba  y el hecho de que no dijera nada me daba a entender que había comprendido, por ello proseguí, no obstante al dar el segundo paso escuche un reproche  de su parte.

—Me parece alguien desagradable y petulante.

PDV: Claire

El tener que soportar cada cosa que hace era cada vez más difícil  para mí, por ello sin tener el debido cuidado en mis palabras repuse lo que se merecía. Ante ello se giró mirándome con una expresión que denotaba desagrado.

—Menos veinte puntos por grosera, lo que derivaría en una escala del uno  al cien en ochenta puntos. De llegar a cero considérate despedida, no me importa lo que diga Bob. Vamos, andando, de seguro nos tardaremos y debo descansar, el dormir mis horas me permitirá  mantenerme bello.

Sin intención de cambiar mi actitud con la misma expresión de molestia me dirigí a donde me llevaría. Debido a que andaba en su compañía el vehículo que nos trasladaba era increíble, espacioso y muy bien equipado.

Minutos más tarde de ese recorrido que dimos en el auto llegamos al primer lugar que visitaríamos. El sitio en cuestión era lujoso, tal parecía que no sería nada accesible para alguien como yo que acostumbra a ahorrar más de lo necesario, sin embargo, el hecho de que sería un obsequio de su parte decidí aceptarlo.

—Debo decir que agradezco este gesto de su parte el que me brinde esto como parte de un obsequio…—mis palabras fueron interrumpidas por el quien repentinamente se giró antes de proseguir.

—¿Como dice? ¿Obsequio?     

—Pues sí, se supone que pretende cambiar mi manera de vestir y mi cabello.

—Efectivamente,  pero lo descontare de su primer pago, el cual veremos si lo llega a obtener, de lo contrario tendrá una deuda conmigo, otra de las muchas que ya tiene.

—¡No es justo! no puede imponerme una deuda. ¿Acaso no admira el sitio a donde me trajo?

—Lo que no es justo es andar con alguien que luce corriente y sin nada de clase y elegancia.

En definitiva este trabajo que había tomado era el peor de todos, no solo me había impuesto un acuerdo sino que también añadiría una suma que debía pagar sea como fuera.  

Irlanda Castillo

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