No puedo creer el descaro de este hombre, pero entonces cuando estoy decidida a gritarle que se vaya al diablo, noto como Anakin pasa por mi lado y me regala una mirada, en la que noto su advertencia, su sentencia y la clara intención de aclararme que no está jugando, que si no lo hago y no termino con Luke en diez minutos él lo hará, no puedo hacerlo, diez minutos eso es una porquería ¿Quién termina con su prometido de años en diez minutos? Es increíble que sea yo la que tenga que hacerlo, debería cumplir algún tipo de récord Giner con eso, lo peor de todo es que al parecer mi maniática mente no puede dejar de bromear ante tal situación.Tal vez es por esto estoy una demente, completamente loca, una desquiciada, tanto así que cuando llego hacia él, siento que hago un gran esfuerzo en alejar un poco el licor de mi cabeza, además del hecho de que tal vez Luke considere que solo se trata de una chica ebria diciendo tonterías, decido que lo mejor que puedo hacer es concéntrame en aparent
--¿Te divertiste? Podría jurar que si… Incluso hablándole de esa manera a tu hermano y a tu prima… Mira nada más que mujer tan desalmada te has vuelto en todo este tiempo Lea… --observo a Anakin como si estuviese loco y solo decido que no estoy dispuesta a seguir con esta noche de porquería, solo quiero dormir y mañana decidiré que hacer, por ahora solo quiero dormí, solo quiero eso.--Hasta mañana Anakin… Disfruta de la fiesta… --una risita se escuchó en el silencio de la casa, en lo que solamente acompañaba la música distante que proyectaba el jardín al ser estar la fiesta en todo su apogeo, mientras que Anakin parecía divertido con la situación y parecía no estar dispuesto a dejarme ir con tranquilidad.--Es curioso que no te importe lo que tengo que decir, pero ¿Qué puedo esperar de alguien tan desalmada como tú? Mira que engañar a ese chico por tanto tiempo, sin duda alguna eres igual o peor que yo...Detengo mis pasos y me giro sobre los talones, él ha desatado su corbata, su ch
--No puedo creer que hubieses querido comportarte como un maldito niño, no puedo creer que de verdad hayas actuado como un idiota, ¿Cómo carajos pensaste en hacerlo? ¿Cómo carajos? --observe a Andreas con un rostro cansino y mi mirada se fue hacia el conductor de mi lujoso auto y note como este tragaba en seco al notar mi mirada maldita sobre él.Seguramente estaba rogando con que no lo asesinara por el hecho de que estaba escuchado como me regañaba Andreas, seguramente estaba pensando en que si él quitaba siquiera un poco la mirada de mis movimientos él podría no percatarse cuando sacara mi arma y le volara los sesos, que tonto era de verdad, no voy a ensuciar mi auto y mucho menos le dispararía ahora cuando podemos estrellarnos y crear un caos, aunque lo estoy considerando al ver que no se calla Andreas y me regaña incluso olvidando el maldito psicópata que soy.--De verdad es que ¿Dime que está pasando por tu cabeza? ¿Dispararle? ¿De verdad eso querías? Hacerlo ante sus ojos, ella
--Uno, dos, uno, dos, eso es, concéntrate, solo concéntrate… --digo esto mientras patino por el hielo e intento crear una nueva coreografía.No sale nada, parezco completamente desenfocada, una amateur, una persona que no lleva toda su vida en este trabajo, en esta forma de vivir, si mi entrenadora me viera en estos momentos seguramente estaría más que decepcionada de mí, pero entonces me detengo en medio de la pista de hielo, sin saber qué hacer, hasta que inicio una canción en aquella lista de aleatorio que no imagine que podría algún día siquiera considerar para coreografía y mientras sonaba a todo pulmón en la pista de hielo love on the brain de Rihanna mis movimientos simplemente fluían.Lograba enfocar en cada uno de ellos la coreografía, mis sentimientos y cada una de las piruetas completamente sincronizadas, incluso saltos cuatropees que me caracterizaban siempre por ser casi imposibles para algunos y fáciles para mí, con ello había logrado ganar el oro, pero ahora no me impor
No me jodan, que lugar tan grande, que lugar tan hermoso, era como un castillo, la estrada estaba custodiada por una gran entrada, en ella había un hombre que hablaba por megáfono y mi hermano coloco su dedo para poder ingresar, en lo que al adentrarnos por el gran portón el auto condujo unos minutos en medio de un bosque inmenso que decoraba el interior, jamás imagine que Anakin viviera en un lugar como este, jamás imagine poder observar tal detalle y tanta presencia.La mansión era blanca de unos tres pisos muy bien detallada, con unos toques modernos, como grandes ventanas de vidrios y una fuente que decoraba la entrada, nada que ver con mi hogar, o mejor dicho con el de mis padres, la verdad es que en suiza tenía solo un pequeño apartamento el cual Luke solía llamar la ratonera, la verdad es que amaba ese lugar, era pequeño y no me importaba en nada que muchas veces pudiese ser peligroso, aunque a mí jamás llegó a suceder algo, en lo que según Luke vivía rezando por mí cuando salí
Lo observe a sus hermosos ojos y me quede de piedra al verlo, él siempre me ha perecido mágico, atrayente y muy, pero muy lleno de tantas cosas que me debilitaban, su físico, sus expresiones e incluso cada gesto que hacía, aquellos que iban desde la manera más despectiva, hasta la más tierna que muchas veces cuando era una niña consideraba que solo eran para mí, que Anakin no le sonreía a todo el mundo, que su mundo giraba a mí al redor, juro por Dios que así fue cuando era niña, pero ahora ¿Qué podría ofrecerme él? ¿Una vida llena de tristezas?, una vida llena de muchas circunstancias tristes, no quería eso, quería mucho más en mi vida, quería ser la única para él, quería que me considera indispensable en su vida, pero sabía que no era más que un sueño.--Deberías soltarme… Esa vida tuya llena de agonía, tal vez se deba al hecho de que te tengo ahora en eso, de no estar con otras mujeres… --una sonrisa surco de sus labios y noté como su mano era pasada por mi pantalón deportivo, en l
--Ah… Maldita sea, malditas sea, hija de puta, te mataré, te mataré… Ah… --doy otro maldito quejido mientras me levanto del suelo y me encuentro con la mirada llena de diversión de Kendrik, quien al parecer está completamente complacido con la situación --¿Qué haces aquí?--¿A quién maldices a la leona que acaba de salir después de golpearte? ¿O a la perra loca que hizo que te golpearan? --hijo de puta, de verdad que odio que no me respete lo suficiente como para hacer ese tipo de comentarios, de lo que estaba más que seguro que serían los más amables dirigidos hacia él en lo que trascurría esta maldita mañana del carajo.--¿Tú que crees? Quiero matar a la perra de Bonnie Cameron, esa maldita loca no hace más que hacerme enojar, juro que de no ser porque su padre y yo tenemos tratos, ya estuviese tocando su puerta y la estuviese cortando en pedacitos… --una sonrisa surco de sus labios, en lo que note su medio rostro lleno de cicatrices de quemaduras y dé nuevo aquella ira que siempre
¿Cómo puedo no ser más flexible? ¿Cómo puedo no ser más consciente? ¿Cómo puedo no ser más estable en la postura de ángel? ¿Cómo puedo no ser rígida al dar mis giros? ¿Cómo Anakin cree que puede hacer conmigo lo que desee? ¿Cómo puedo hacer para que las cosas sean más estables? ¿Cómo puedo hacer para mejorar mi concentración cuando estoy con él? ¿Cómo puedo hacer sin que me desgaste tanto los músculos? ¿Cómo puedo mandar al carajo a Anakin de una buena vez por todas? ¿Cómo puedo? ¿Cómo puedo? ¿Cómo puedo? ¿Cómo?--Ah… Maldita sea, concéntrate, concéntrate, se supone que estás entrenando, se supone que estás haciendo lo que deberías hacer, ya deja de pensar en ese imbécil, concéntrate, concéntrate… --seguramente creerían que estoy loca de no ser porque esta habitación es insonora.Doy un gran suspiro y me miro en el espejo del gran salón, mientras mis medias veladas se complementaban perfectamente con el maillot y mi cabello recogido con las mejillas rojas por todo el esfuerzo era la i