Doy un gran suspiro cuando llego junto a mi padre, ya me he tranquilizado, ya estoy calmada, ya lo estás Lea, ya lo estás, no debes sentirte presionada, no debes sentirte mal, eres fuerte eres inteligente y no te dejaras envolver por mentiras de nadie, no lo harás, observo hacia Ailan quien está a mi lado y me observa con su mirada llena de intriga, mientras que mi padre está en un costado hablando con el hombre que iniciara la marcha nupcial para mi entrada, sé lo que veo en sus ojos, es preocupación, es una terrible preocupación en su mirada, la conozco muy bien, él la verdad es que no sabe mucho que hacer en estos momentos, pero no tiene la menor idea de cuánto le agradezco el solo hecho de querer estar allí para mí, ya que no me ha dejado sola desde que me encontró lo de la habitación hecha un desastre.

--¿Estás segura de que estás bien? ¿Todavía quieres seguir con esto a pesar de todo? Deberíamos llamar a Barbie, ella siempre tiene las respuestas perfectas para tus días malos… --