—Bienvenida al salon de belleza de Raw, ¿tiene usted cita para el dia de hoy?—Me pregunta la recepcionista.

—Si, Amy Rose.—Volte mi rostro a la puerta.—¿Usted cree que mi cabello se ve mal?

—Necesita un buen corte, las puntas estan quemadas y creeria que un cambio de color le haria bien.—La joven me pidio que la siguiera.

—Odio mi vida, como puedo ser tan descuidada conmigo misma.—Gruñiiii.

Durante toda la tarde estuve sentada en una silla, esperando a que el tinte quedara bien en mi cabello, me estaba aburriendo asi que tome mi celular y me puse a jugar al ajedrez hasta que por fin el estilista me dijo que cerrara los ojos y al abrirlos me quede sorprendida con el cambio que vi, me enamore de mi misma.

—Muchas gracias Raw, realmente usted es brillante ahora entiendo porque es tan solicitado.—Dije mientras pasaba mis manos por mi suave cabello.

—Es un placer arreglar a la esposa del joven Mike.—Hizo un tipo de venia.

Me fui del gran salon, tenia que ir a mirar ese mismo dia como