—Amiga, sé que no voy a solucionar nada, en el preciso momento que Kaleth se entere de que estoy embarazada, va a querer saber si él es el padre, que le voy a decir, se dará cuenta si le miento, no podré mantener mi seguridad ante él. —respondí afligida—Amiga, no tienes que decírselo, tú eres una mujer profesional, independiente, no necesitas a ninguno de los dos para criar a tu hijo, en cuanto lo que piense tu madre no deberías darle importancia. —espeto Martha —como siempre te he dicho, eres una mujer adulta, capaz de tomar sus propias decisiones, no tienes por qué estar detrás de las faldas de tu madre, ya estás muy grandecita, ¿no lo crees? —preguntó consolándome—Tienes razón, solo diré que estoy en embarazo, no me siento capaz de afrontar ninguna de las dos verdades, ahora, sé que en el momento en que diga que estoy embarazada, asumirán que mi hijo es de Fernando, de ese modo solo tendremos que usar a tu amigo, si tú dices que puede hacer que mi examen parezca con menos tiempo,
Todo iba bien, finalmente había llegado el día de la boda de Kaleth, me puse un vestido gris y me maquillé, estaba psicológica y emocionalmente preparada, habíamos tomado un vuelo y habíamos llegado, habían ido dos de mis amigas, mi madre, mi padre no quiso ir, cuando llegamos la novia ya estaba allí, había llegado primero, su pancita ya se veía muy grande, en algún momento toque la mía preguntándome cómo me vería yo. Surgían pensamiento cómo te verás ridícula, ya eres demasiado mayor, pero sabía de algunas mujeres habían tenido su hijo a esa edad, de hecho muchas preferían tener hijos después de los 25, deje de preocuparme y nos sentamos a esperar.Inhalado y exhalado tratando de ocultar lo que seguramente sentiría al ver a Kaleth, llevamos tiempo esperando, parecía que él no iba a llegar, uno de los empleados se subió a dónde estaba la novia y tomo un micrófono diciendo que tenía algo que anunciar y era que Kaleth había dejado un videoclip que había pedido que pusieran en pantalla g
Me senté en el sillón para poder recuperarme del bajón de presión que había sufrido tras la ida de Kaleth, tenía que admitir que él tenía razón, había sido yo quién la había estado mintiendo todo el tiempo, no solo por el hecho de no aceptar que nuestra diferencia de edad no era un impedimento para estar juntos, ahora también le había mentido, negándole la posibilidad de estar con su hijo, me lo pregunto, me hizo prometer y como si nada le estaba diciendo a la cara que no era hijo suyo, le dije que el hijo qué estaba esperando era de otro hombre, él se marchó y el tiempo transcurrió.Habían pasado aproximadamente 2 meses en los cuales no sabía nada de Kaleth, más que lo que me contaba mis amigas que de vez en cuando visitaba el club, seguía dedicándose a ser striper, ahora no estaba segura de que lo hiciera por diversión, mis amigas me decían que solían verlo con algunas chicas, las cuales eran jóvenes, me hacía sentir celosa, pero no había nada que hacer, ya no había remedio al lío q
Él conducía, había puesto su mano sobre la mía, al ver que toque mi vientre quitó su mano, supuse que se había molestado al recordar que estaba esperando un hijo de otro hombre, que no era él y que este hombre ahora fuese un estafador profesional, eran sus suposiciones, podía imaginar.Creo que en el momento en que deba decirle la verdad se va a poner muy furioso, el saber que puse a su hijo en peligro, el solo hecho de pensar en tener que afrontar esta verdad es aterrador. No saber cómo va a reaccionar, supongo que se molestara demasiado y no es para menos.Habíamos llegado a su oficina, el guardia nos abrió, entramos y nos pusimos a revisar los documentos, me indicó que hacer y eso hice, allí entró mi papel como abogada, todo estaba codificado, perfectamente encubierto, pero podía entender lo que estaba pasando, efectivamente la responsabilidad de esos fraudes recaería sobre todos los socios, con los cuales Fernando había estado haciendo negocios, de no hacer algo a tiempo perdería
Estaba muy nerviosa parecía que él ya sabía que me había enterado de la clase de persona que era, estaba muy extraño haciendo preguntas, además intentaba recordar si había dejado algún documento que lo delatara en la sala de mi casa. No me quedaba más que seguir su juego y averiguar si él sabía que ya conocía sobre sus planes.Él seguía conduciendo, no llegábamos al lugar donde supuestamente tenía la sorpresa para mí, el trayecto se me estaba haciendo eterno sobre todo porque yo sabía la clase de ser que era, le dije que llamaría mi madre y me lo permitió como no sabía dónde íbamos no pude decirle más que solo que estaba con él, había pasado una hora y no llegábamos a ningún lugar, es como si estuviésemos dando vueltas en círculos, seguí hablando indagando sobre sus cosas, para tratar de ocultar el miedo que estaba sintiendo. No sabía ni de que hablar, solo lo miraba y puede notar su risa burlona y satisfactoria, su rostro había cambiado, lo que me hacía pensar que algo malo estaba po
Escuché que alguien había entrado a casa me asusté, pero me tranquilicé cuando vi que era Kaleth, le iba a reclamar, pero no tenía caso ya estaba acostumbrada a que lo hiciera, no había cambiado la cerradura era como si esperará que en cualquier momento él entrará a mi casa.—Hola Mariam, no quería molestarte, ni asustarte, solo quería venir a ver que estuvieras bien, esperaré un par de horas y me iré. —afirmó sinceró —¿cómo te ha ido con Fernando? —preguntó —¿tú qué piensas? —crees que sabe que ya sabemos la verdad.Estuvimos hablando sobre eso y otras cosas, él estaba a punto de irse y le dije que se quedará un poco más.—¿Te has divertido en el club?—pregunté con amargura —Vi que tienes muchas nuevas clientas, sé que no es mi asunto, pero se te ve feliz siendo un Striper de nuevo, como no vas a estarlo, tienes a cientos de mujeres locas por ti. —añadí dolida—¿Y eso te importa mucho?—preguntó secamente —Mariam porque quieres saber si tengo muchas mujeres, tú estás esperando un hijo
—No se te ocurra mencionarle esto a Fernando, como siempre tendré que arreglar tu vida, ya me vas a entender cuando tengas que lidiar con tu hija. —bufo mi madre.Tenía tantas ganas de decirle la verdad, que amaba a Kaleth, que Fernando había era un delincuente y que se había equivocado con sus decisiones como la mayoría de las veces, sin embargo, me senté y escuche sus sermones, estaba tan acostumbrada que ya me sabía de memoria sus palabras, solo esperaba no usarlas con mi hija, me había prometido ser la mejor madre, cariñosa, comprensiva, escucharía y trataría de entender a mi hija.—Como fue que una mujer como tú, educada y pudiente terminó involucrada con un Striper, con un mantenido bueno para nada, no me respondas que eso seguramente es obra de esas arpías que tienes por amigas, esas buenas para nada, que quieren arruinar tu vida como lo han hecho con las suyas. —dijo mi madre sacándome de mis casillas.—Madre de mí puedes decir todo lo que desees, pero te pido que no te metas
Nos habíamos despedido, me sentía feliz porque había decidido darme una oportunidad con Kaleth. Por el momento tendríamos que ocultarlo por seguridad, lo importante era que ya había tomado una decisión y que esta vez no cambiaría ni por mi madre, ni por ninguna otra persona que se quisiera interponer.Fui a la cama y me acosté mi madre se acostó a mi lado parecíamos dos enemigas, no podía entender por qué era así conmigo, pareciera que nunca me hubiese querido, parecía hija adoptada, desearía saber por qué es así, que fue eso tan malo que le hice, actúa como si me odiara. Al día siguiente me levanté antes que ella, me organice y me fui a trabajar, ella se quedó durmiendo, le dejé una nota, le deje escrito que estaría en la oficina por si deseaba pasar a vigilarme, al llegar a la oficina me encontré con mi secretaria que me esperaba con un hermoso ramo de flores que habían enviado en el anonimato, cuándo entra mi oficina recibí una llamada era Kaleth me preguntó si podía hablar.Estuvi