El pequeño pie seguro se dirigía hacia la cocina principal que estaba en el primer piso."¡Mamá!" se escuchó el grito entre el bullicio de los utensilios de cocina de la cocina.Eleana miró brevemente, ya que estaba cocinando verduras en la sartén."¡Hola, no corras, Amanda!" respondió Eleana en voz alta también.Amanda obedeció. Dejó de correr y se acercó a Eleana."¿Aún no te has bañado?" preguntó Eleana al ver la adorable carita mirándola."No. Quiero a mamá", respondió Amanda.Eleana rió. Dado que ya había mojado un poco su rostro, Eleana podía tomarse un momento. La mujer se inclinó para levantar a Amanda y la sentó en la mesa de la cocina.Esta mañana se sentía mejor. También había prometido cocinar el desayuno para Amanda anoche."Espera aquí. Mira -" Eleana señaló a los dos cocineros que estaban preparando otro plato. "No te empujarán por accidente si te quedas allí de pie."Amanda asintió feliz. Estaba bien sentarse siempre que pudiera mirar a Eleana."De acuerdo, lista. Tía

Eleana había llevado a Axton a su oficina de trabajo. Una vez más, gracias a la invitación de Gery."Qué gran oficina. La antigua oficina de papi no era tan grande como esta," murmuró Eleana mientras observaba el espacio de trabajo de Axton.Ella se quedó en el centro de la habitación, mientras Axton llevaba su silla de ruedas hacia la parte trasera de su escritorio."Meghan, hazme café," ordenó Axton."¿Café?" se sorprendió Eleana. Asegurándose de que había entendido correctamente. Ya que acababa de estar distraída."Señor, ¿qué tal si yo le hago el café? Después de todo, ¿no es...?"Axton le lanzó una mirada afilada a Gery mientras su asistente negaba su orden.Al instante, Gery se calló y bajó la mirada. No para defender a la mujer, sino porque Gery sabía lo difícil que era hacer un café apto para Axton. Normalmente, en la oficina, Gery preparaba el café. Mientras que en casa, solo Dulce podía hacerlo.Axton se enojaba e incluso castigaba a la persona que le preparaba un mal café.

Gery regresó de la sala de fotocopias después de completar la tarea de Axton. Sus pasos se detuvieron al ver que la puerta de la oficina de Axton no estaba completamente cerrada.¿Habrá olvidado Meghan cerrarla antes? Pensó el asistente.Gery intentó echar un vistazo, solo podía ver el escritorio vacío de Axton a través de la rendija de la puerta.¿Dónde está? ¿Está el señor Axton fuera?Gery sostenía algunas hojas en la mano. Su informe debía llegar a Axton de inmediato. Y él debía regresar a su oficina pronto para completar otras tareas.Finalmente, Gery entró en la habitación sin llamar. Estaba seguro de que Axton no estaba en la habitación. Pero se detuvo en seco al ver a la pareja esposo y esposa en una situación íntima."Lo siento -"Gery se volvió instintivamente.Axton, que devoraba los dulces labios, también se sorprendió. Especialmente Eleana, que aún estaba sentada en su regazo."¡Lo siento, me voy!" Gery no se atrevió a escuchar la ira de Axton. Salió corriendo y cerró la

"Mami!" El regreso de Axton y Eleana fue recibido por Amanda. Axton acababa de ser ayudado a moverse a la silla de ruedas. Luego se acercó al niño empujado por Eleana. "Tío Axton, ¿entonces me comprarás un helado de chocolate?" preguntó Amanda de inmediato. "Oh, tío se olvidó," respondió Axton. Realmente lo olvidó. Estaba pensando en qué castigo sería adecuado para Robert desde que supo de su regreso. "Entonces, Amanda quiere ir a comprarlo con mami. ¿Puedo...?" Amanda parecía suplicar. ¿Mami? Amanda encontraba difícil llamar "Tía" a Eleana. Eleana, que estaba de pie detrás de Axton, le guiñó un ojo y le hizo una señal con la mano en forma de 'ok!' Axton no estaba interesado en hablar mucho con nadie. Estaba de mal humor esa tarde. "Bueno, vayan ustedes. Tío tiene trabajo," dijo Axton forzando una sonrisa para Amanda. En un instante, Amanda saltó de alegría. "¡Yuhuu! ¡Vamos de paseo por la tarde!" gritaba Amanda emocionada. A Axton no le importaba, les indicó a su

La solicitud de Axton para visitar las Montañas Linghe mantuvo a Eleana despierta toda la noche. "¡Qué tonta soy! ¡Cómo pude hacer tantas compras usando la tarjeta de crédito de Axton para enviar cosas allá! ¡Aaaah! Realmente me arrepiento...." Eleana se cubrió la cara con la almohada. Quería gritar, pero solo podía hacerlo en silencio en su mente. Los minutos antes del amanecer se sintieron interminables. Su mente seguía imaginando la ira de Axton y la emoción de Frederick. No sabía qué pasaría si Axton descubría su disfraz. Eran las cuatro de la mañana. Eleana decidió levantarse de donde estaba. Se sentó abrazando la almohada. Siguiendo las órdenes de Axton, solo le permitían dormir en el suelo. Dormir sobre una gruesa y cálida alfombra. Miró hacia la izquierda, Axton aún dormía profundamente, de lado hacia ella. "Es tan guapo. Siento que nunca antes había visto a un hombre tan guapo." Cejas negras y gruesas, como el cabello de ese hombre. Rasgos faciales marcados, nari