—Buenas noches— musitó con voz baja, rogando al cielo, no verse ridícula para no darle el gusto a esa mujer que parecía salirle hasta en el agua como fantasma que la persigue.Todos respondieron el saludo, y agradeció, aunque la tipeja puso cara para hacerlo, en fin, fue menos bochornoso a que se qu
Leer más