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Todos los capítulos de Eres mi Luna, Hija de Beta: Capítulo 31 - Capítulo 40
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Capítulo 16: Atrapados en el infierno.
Capítulo 16: Atrapados en el infierno.【Elouise Harmless】Al entrar en aquel edificio quedo deslumbrada por lo hermoso que es, siento como Christopher me toma firmemente de la mano guiándome hacia donde me quiere llevar.Estamos en un restaurante prácticamente vacío, en las puertas están algunos guardaespaldas, sin embargo, estamos él y yo, me invita asentarme y sonriente lo hago, luego de asegurarse de que me haya sentado, él se sienta al frente de mí e inmediatamente viene hacia nosotros una camarera con dos menús.—Buenas noches su majestad, aquí les presento las opciones de almuerzo del día de hoy. — Se presenta con un tono nervioso, yo tomo una de las cartas y le da la otra a Christopher.—Gracias, por favor puedes traernos un Käsknöpfle para mí y para el rey… — Me decido rápido porque es mi platillo favorito, él me arroja una mirada deslumbrada por mi agilidad.—Yo quiero una sopa de jamón con una botella de champagne, Y ¿Tú que vas a pedir para tomar? — Inquiere Chris mientras
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Capítulo 17: Estancado sin ti.
Capítulo 17: Estancado sin ti.【Christopher Hans】—¡Ah!, ¡Elouise! — Grito desesperadamente, levantándome del lugar en donde estaba sentado. Observo a mi alrededor, estoy en alerta total, busco a mi esposa detenidamente y al darme cuenta de que no estoy en el restaurante en donde la había llevado me desespero.Mi respiración se agita y empiezo a sudar, camino hacia la puerta más cercana y al salir de la una especie de salón, me encuentro con un largo pasillo lujoso con luz tenue.Camino lentamente, mi lobo me está alertando de que no es muy seguro andar por aquí, así que agudizo todos mis sentidos para estar pendiente a cualquier cambio en el ambiente o si viene alguien.—Por fin despiertas, fue todo un milagro poder rescatarte de ese maldito infierno. — Una voz masculina se dirige a mí, al reconocer la voz. Mi ceño se frunce y trago grueso sintiendo una especie de frío en mis manos.«Sí, él está aquí significa que Elouise».—¿Dónde está la reina? — Inquiero volteando todo mi cuerpo ha
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Capítulo 17.1: Aún daría mi vida por ti.
Capítulo 17.1: Aún daría mi vida por ti.【Christopher Hans】Camino con paso autoritario mientras que sudo llego a la Cárcel de Liechtenstein, mi respiración está muy agitada porque vine corriendo para acá, ya que, en donde estaba no contaba con un vehículo.Los guardias al verme quedan sobresaltados y ambos fruncen el ceño seguido de arrodillarse frente a mí. «Ya había pasado varias veces por aquí, por lo que, no veo necesidad de esta repentina muestra de respeto».—Su majestad, hemos escuchado lo que ha estado pasando en las fronteras del lado sureste del territorio, ¿A qué se debe el honor de su presencia aquí? — Inquiere uno de ellos aún con la cabeza abajo, me cruzo de brazos y arrugo mis brazos, tolerando esta pregunta.—Vine para hacer una visita a un recluso. — Declaro el motivo de mi visita, ellos se levantan y me dejan pasar, camino directamente hacia dentro de las instalaciones. Olfateo un poco, rastreando la esencia de Félix. «Ya sé donde está».Con el camino trazado por mi
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Capítulo 17.2: Lealtad.
Capítulo 17.2: Lealtad.【Christopher Hans】—No puedo dejar que fallezcan así no más… — Anuncio casi inaudible para Félix, por lo tanto, sin importar que si me acompañe o no entro al edificio en llamas, y busco en las paredes la alarma contra incendios, la cual está del otro lado del salón de entrada al edificio.Corro hacia donde se encuentra la alarma, consigo llega hasta donde está y la presiono, al darme vuelta veo como un pedazo del techo cae en medio del salón obstruyendo el paso.—¡Christopher! — Grita Félix, del otro lado, las llamas se hacen cada vez más fuertes y el humo inunda a gran velocidad todo el salón, justo se encienden los rociadores, pero, como no dan gran cantidad de agua, apagan poco a poco el fuego, pero, no lo suficiente.Inhalo el humo, lo que me hace toser, me tapo la boca, aunque no consigo respirar adecuadamente, siento la garganta seca. Busco corro hacia mi derecha para ver si puedo escapar y nada.Corro hacia mi izquierda y hay un pequeño paso que las llam
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Capítulo 18: No puedo cuidarte.
Capítulo 18: No puedo cuidarte.【Elouise Harmless】Me siento mareada e intento sentarme, sin embargo, al hacerlo, me percato de que estoy reposando sobre algo suave, lo que me alarma, ya que, la última vez que recuerdo estar despierta estaba en un restaurante.Con un pequeño picor en las palmas de las manos, me saco la manta y detallo todo el lugar donde estoy. Me parece tan familiar, sin embargo, una pequeña sensación casi impredecible.Me señala que este sitio en donde me encuentro es peligroso. Doy algunos pasos, me voy hacia la ventana de esta habitación para mirar por fuera.—¡Christopher! — Digo en voz alta el nombre de mi esposo acordándome lo que pasó antes de perder la consciencia. Me empieza a doler la cabeza, y coloco mi mano sobre el vidrio de la ventana y con mi otra mano la coloco en mi cabeza, miro hacia el paisaje de afuera y no reconozco el sitio es tan diferente Liechtenstein.—Es porque no estoy en Liechtenstein. — Susurro para mí, lo que me hace sentir una desesper
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Capítulo 18.1: Ni tú ni yo.
Capítulo 18.1: Ni tú ni yo.【Elouise Harmless】Me cachetean muy fuerte tanto que me hacen voltear la cara, mi nariz está sangrando y eso fluye sobre mis labios, por lo que, escupo para no seguir saboreando el sabor de hierro.—Jura tu lealtad hacia mí, no te dejarás este salón hasta que declares que yo soy tu reina. — Me ordena la chica que está sentada en el trono solo jugando con su cetro.—Podrías liquidarme ahora mismo y jamás declararía mi lealtad hacia ti, yo soy mi propia reina. — Le sentencio mientras que le observaba a los ojos, ella me atraviesa con la mirada, chasquea los diente y hace un ademán, dándole una instrucción a un caballero, el cual, viene a mí y me vuelve a cachetear.Una y otra vez, veo el hombre que me trajo aquí, el que dice ser mi guardián, no hace nada por mí o por detener este sufrimiento y ni siquiera puedo moverme, ya que, me han atado de manos y de pies.—¿Qué está pasando aquí?, ¡Belice! — Una voz masculina se acerca al salón, de momento todos voltean
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Capítulo 19: Lo que quise hacer por ti
Capítulo 19: Lo que quise hacer por ti【Christopher Hans】—Alfa ya se están controlando las fronteras y lobo enemigo que pase, lobo que quedará como rehén. — Aseguro unos de mis comandantes y yo asiento con la cabeza, doy algunos pasos y me siento y abro una botella de agua. «El enfrentamiento de hace un rato con unos lobos rebeldes fue algo agotador».En eso, mientras que bebo agua, entra Félix en su forma animal y frente a mí vuelve a su forma humana. Parece cansado.—Christopher, eres un idiota. — Disiente acompañada de una carcajada, yo llevo mis labios hacia un lado, demostrándole mi descontento. —Lo siento, te quería comentar acerca de la misión de ayer, logramos entrar al castillo y liquidar a gran parte de los caballeros que deberían de proteger esas instalaciones, aparte de que me vi a Elouise. — Me informa y en su voz se nota esa emoción cuando dice el nombre de mi reina.De inmediato, dejo de beber agua y en el corazón siento un gran alivio que me echo hacia adelante apoya
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Capítulo 19.1: Mi guerra contra ti.
Capítulo 19.1: Mi guerra contra ti.【Christopher Hans】Bajo lentamente a Hannie de mis brazos volteo mi cuerpo hacia la persona que está en frente de mí. No puedo creer que esté parado frente a mí, obviamente se ve que aún está débil, sin embargo, ya despertó.—Erick. — Cuando digo su nombre, él extiende los brazos y camina a paso lento hacia mí, por lo tanto, con una emoción latente en el pecho, doy pasos largos hacia él y lo rodeo con mis brazos.Cierro los ojos, lo aprieto muy fuerte y le palmeo en la espalda. «Siento que no lo había visto en años, ya había perdido la esperanza en que volviera a ser el mismo de antes».—Pero, ¿Cuándo despertaste?, es que te ves muy bien para meses de estar en cama, ¿Ya fuiste al hospital? — Me alejo de él para verle la cara, coloco mi mano en su hombro y él se ríe en mi cara cuando lo lleno de preguntas.—No seas un debilucho, ya estoy bien, ja, ja, ja, yo desperté hace unas semanas, lo que pasa es que tenía que recuperarme, lo hice bastante rápid
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Capítulo 20: Lo que era.
Capítulo 20: Lo que era. 【Christopher Hans】 Me dirijo hacia un podio junto a mi hermano que está en fachas, lo volteo a ver y oprimo los labios, muy disgustado de que todo se haya dado de esta manera. —Buenos días, sé que esta noticia es más que evidente y que sí, es muy inesperada, de hecho yo hoy también me acabo de enterar de todos esto, así que, para dar mi testimonio, confirmando todos los rumores sobre de que mi hermano ha despertado es cierto, aquí lo tienen, Erick Hans. — Con esta breve introducción dejo el podio para darle lugar al cabeza hueca este. Al verlo a los ojos, aprovecho y le lanzo una mala mirada y él me la regresa, me coloco en donde estaba parado y me cruzo de brazos, esperando a que diga el discurso que ensayamos unos minutos antes de estar en este escenario en frente de la prensa. —Como muy bien dijo mi hermano, el Rey Alfa Christopher, hoy he dejado que se supiera de mi regreso, mantuve esto secreto porque debía recuperarme y quería volver siendo el mismo
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Capítulo 21: ¿Cuál heredero?
Capítulo 21: ¿Cuál heredero? 【Christopher Hans】 —¡Habíamos dejado en claro que la noticia de tu reclamo al trono se iba a dejar para más tarde!, es muy temprano, apenas se enteran de que despiertas y ya quiere… — Erick me interrumpe cuando le bramo, él me observa con fastidio y yo le regreso la mirada viviendo de la furia. —Por eso quería aprovechar al confirmar que he regresado, también decir que quiero luchar por mi derecho al trono.— Una vez más proclama lo mismo, nadie lo puede mover de allí. —Me siento muy indignado aún. — Es lo único que puedo responderle al respecto, siento un nudo en mi garganta para no verle la cara, volteo hacia la ventana y es cuando me doy cuenta de qué justo hemos llegado en dónde se encuentra los ancianos de la manada. Cuando se detiene el carro, coloco mi mano sobre la puerta y la abro de este modo salgo y me abro camino hasta una casa bastantemente peculiar. —¡Hey!, espérame. — Se dirige a mi Erick con un tono de voz alto y claro, giro un poco mi
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