-Te odio Haley, te odio... hiciste que Paul me odiara, me metiste a la carcel, ¡¿qué carajos haces aquí?! Solo para fastidiarme y restregar en mi cara que estoy encerrado y que tú ganaste, ¿no? Por Dios... no tienes límites. Haley está en la cárcel, observando a James a través de las barras de metal que lo encarcelan. Ya tiene 5 meses desde que fue arrestado y Haley en todo ese tiempo no lo había visitado ni una sola vez, pero ahora... quería molestarlo un poco, o mejor dicho, tenía un nuevo plan maestro. Y de nuevo, su plan era utilizarlo a como de lugar, sin importar sus sentimientos. -Oh, mi amor-Haley cambia su voz a una tierna y lo mira con ojos de arrepentimiento-. Te pido que me perdones, ¡no sé que fue lo que pasó! Haley comienza a sollozar como lo hace de costumbre cada vez que necesita salirse con la suya, pero aún así, el resentimiento de James no parece perturbado por su falsa actuación. ¿O tal vez...? -Tienes que creerme, yo no quería entregarte, ¡pero Paul había desc
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