Capítulo 187HelenaSantiago, aunque no estaba muy de acuerdo con la boda de Julieta, no tuvo más remedio que aceptarla, tuvo que hacer lo que era lo correcto y tuvo que apoyar a nuestra hija y su decisión de unir la vida con la de su novio, para siempre. Eso era lo que se tenía que hacer, apoyar a los hijos, aunque decidieran un camino diferente al que nosotros quisiéramos para ellos.Los padres de Jerry, eran muy buenas personas y habían accedido al igual que él a todo lo que habíamos pedido Santiago y yo, a que nuestra hija y él vivieran con nosotros y eso me había gustado que, en todo momento, le daba su lugar a Julieta. Me puse con ella a arreglar el espacio en la casa que ocuparían ella y su esposo, tan pronto se realizara esa boda.–Hija, espero que aquí le guste mucho a Jerry. En este espacio, van a tener mucha privacidad.–Si le va a gustar, mamá. Gracias porque sé que tú fuiste la que intercedió con papá para que pudiera casarme con Jerry.–No me agradezcas hija, sigo pensan
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