Estoy algo nerviosa estoy en el cuarto de Santiago, esperando que venga y entregarme a él, y después irnos a nuestro país, Erick nos dijo que el ponía toda su fortuna a disposición nuestra, con la humillación de hoy esta claro que ellos querían mujeres que sean sumisas, Angélica y yo no encagamos en su perfil, y como ellos ya tomaron una decisión.. lo mejor es decir adiós. Mientras ella está perdida en sus pensamientos, la puerta se abrió, Santiago está tan feliz de ver a su mate, S — ¿Que haces aquí? J — Te esperaba, supongo que al igual que Luis, necesitas hacer algo para poder estar con la mujer que tu escogiste... S — si...— dudaba — porque ustedes nos demostraron que no les interesamos. J — No puedo cambiar lo que piensan, y no quiero discutir este noche, pero puedo pedir un deceo antes. Santiago no sabía que decir en este punto estaba dudando, sabía que si decía esas palabras no abría vuelta a tras y solo asistió con la cabeza. J — esta noche sostenme entre tus brazos, y
Leer más