Un nuevo dia de instituto habia llegado y mi cuerpo y mente aún se encontraban en la hermosa noche que habiamos logrado pasar todos juntos en el restaurante. Tara no hizo nada mas que amenzarme por texto a que le contaria absolutamente todo o las cosas no irian bien, le creia. Y tenia la razón por la cual hacerlo. Recordaba a la perfeccion aquel dia en el que ella no me habló durante un mes entero por no haberle contado que habia tenido mi primera vez con Esteban, se habia enfadado tanto como nunca antes la habia visto y lo único que pude hacer fue esperar a que su enojo se fuera y pueda perdonarme. Aún que esta vez, no habia algo tan extravagante por contar. Solo habiamos cenado felizmente, permitiendole a mi corazón conocer a William. - ¡Hey! di un pequeño brinco al escuchar alguien hablar detras mio. - ¿Te he asustado? ..-pregunto Esteban. Apareciendo en mi vista-. Siempre hago eso, pense que te habias acostumbrando. - No, .. si .. Bueno, tal vez ..-balbuceé-. SI, lo he hecho.

Al llegar a mi casa pude darme cuenta que mi madre se encontraba junto a la madre de William, Alessia. Quien al verme me dedicó una hermosa sonrisa. ─ ¡Querida! ─exclamó. Acercandose a mi─. Que bueno que haz llegado, te estuvimos esperando. ─ Oh, no lo sabia. Me hubiera adelantado clases de ser asi. Pero ella negó:─ No debes preocuparte, lo que queria decirte es que debemos ocuparnos de la fiesta lo mas pronto posible. Esperen .. esperen .. ¿Acaso dijo fiesta? ─ ¿Fiesta? ─pregunte confundida. Mi madre al ver mi respuesta se colocò a mi lado y de forma disimulada me golpeó con su codo. ─ La de compromiso ─me recordó mi madre─. Te habia hablado de ello ya querida hija. Cierto. Lo habia olvidado, por completo. ─ ¿Te has olvidado acaso? ─pregunto Alessia. ─ Siendo honesta, si. ─respondi sinceramente─. Me he centrado tanto en los examenes que no pude concentrarme en la fiesta, lo siento mucho. ella movio sus manos indicandome que mi olvido notorio no deberia de tener mucha imp

Nuestros labios se mezclaban a la perfección, era una sensación distinta. Completamente diferente a la que estaba acostumbranda al sentir cada vez que besaba a Esteban. Algo en mi era distinto como si fuera nuevo, exclusivo. Su mano que estaba en mi mejilla se oculto en mi cabello haciendo que me acercara aún mas a el incrementando la tensión del beso. No podia creer que mi cuerpo respondiera por completo a el, por completo. Mi mano que se encontraba quieta subio hasta su cuello jugando con su cabello como el se encontraba jugando con el mio. Suavemente se acerco hacia mi haciendo que mi cuerpo lento vaya acomodandose en la cama. ¿En serio iba a suceder? ¿Ahora? No sabia que responder a la cantidad de preguntas que comenzaban a aparecer en mi cabeza. Aún que quisiera apartarlo habia algo dentro de mi que queria que el permaneciera asi. Mis manos inquietas bajaron hacia su abdomen al igual que las suyas comenzaron a moldear mi figura. El al separarse tiro de mi labio inferior de la

─ No lograre hacerlo. Es demasiado pronto. Me asegure a mi misma pero un leve golpe en mi brazo por parte de Tara hizo que reaccionara. ─ No te digas eso a ti misma. ─freno por unos segundos─. Escucha, no es facil. Nada lo es. Pero, esto es un destino que tu misma puedes cambiar tal vez .. Ambos logren enamorarse en un futuro. Negue rapidamente. ─ ¿Por que? ─ Somos muy diferentes. No creo que algo exista mas que un compromiso arreglado, el me ayudara y una vez este hecho, nos divorciaremos.─ No puedo creer que escucho esto de ti. La mire enafada por su repentino reproche: ─ Creí que eras mi mejor amiga, tu mas que nadie sabe que amo a Esteban. Mas que a nada. ─ Pero .. ─volteo a verme─. ¿Estas segura que el te ama a ti? Guarde silenció. ─ Soy tu amiga y es por eso que digo esto. No permitas que nadie te impida conocer un amor, en especial esteban. ─ Tara .. ─ Ve a hablar con tu familia y arreglen todo lo que deben de hacer. Estare atenta a mi movil para ti ¿De acuerdo? As

Fue como una corrida de tiempo que sucedió hasta que después de un millón de arreglos nos encontrabamos en el salón. Aún no había visto a nadie, tan solo a mi madre y Alessia quienes se estaban encargando de que hasta el último detalle estuviera perfecto. ─ Bien, creo que es el momento en el que debemos de salir. ─anunció Alessia. ¿Estaba nerviosa? Para nada. Solo estaba a que mojaba mis pantalones, pero lo usual, nada nerviosa. Ambas mujeres se colocaron a mi lado y me guiaron hasta el salón, como si este fuese un simulacro de una boda había un camino largo, no demasiado en donde en el final un William con una sonrisa me esperaba. Había una gran cantidad de personas que no podia conocer, la gran mayoria estaba segura que eran invitados por parte de William y sus padres. Mis pasos se volvieron mas lentos cuando la silueta de Esteban se encontraba al lado de Tessa, su rostro no era feliz. Estaba triste, al igual que mi corazón. ─ Sigue caminando. ─susurro mi madre audible para amb

William se acercó de forma furiosa hacia el haciendo que soltará mi agarre. ─ ¿Que dices? ─sonrio, burlandose de el─. Vienes a mi fiesta de compromiso a tratar de difamar a mi futura esposa . . ¿No es patetico? ─ Tú .. ─le apuntó. Pero aún asi este intervino con cero intenciones de permirtirle seguir. ─ Escuchame aún que hayas estado con ella antes que yo eso no significa que tengas el derecho de estar aquí. ─fruncio el seño─. Ahora toma tu mierda y largate de mi fiesta. Me sentia pequeña junto al lado de ellos dos, no sabía que hacer ni como reaccionar. Todas las personas me miraban de forma intimidante haciendome acobardarme ante ellos. Tessa corriendo llegó a mi lado tomandome del brazo para apartarme lo suficientemente de ellos. ─ ¿Estas bien? ─pregunto rapidamente─. Lo siento, no debi permitir que Esteban bebiera demasiado. ─ Estoy bien. ─menti. ─ ¿CREES QUE POR TENER MAS DINERO ELLA VA A AMARTE? ─gritó─. Lo único que tu puedes darle es la ayuda monetaria que necesita per

Sorpresivamente la fiesta acabo siendo un lujo para todos los invitados quienes se retiraron felices deseandonos un buen camino por delante. Mi madre en muchas ocasiones trato de hablar conmigo para poder aclarar y despejar toda su furia de lo sucedido con Esteban pero William en ninguno de esos instantes se lo permitió. Cuan agradecida estaba por ello. Al acabar la fiesta, nos fuimos hacia nuestra casa junto a William y sus padres también. Ellos cuatro eran las personas mas felices del planeta por nuestro compromiso, mientras que nosotros dos .. Nosotros dos .. Eramos dos personas forzadas a casarse sintiendose realmente confundidos el uno con el otro. ─ Traeré unas bebidas. ─exclamó mi padre con felicidad. Todos asintieron a excepción mia y de William. ─ ¿Ustedes no beberan? ─ No. ─respondi primero─. Creo que ya he bebido lo suficiente por el día. Tú ─mire a william─. Puedes beber si lo prefieres. Pero a pensar de mi aprobación este nego rapidamente: ─ Prefiero que no sea a

─ Yo .. yo ─tartamudeó─. Lamento interrumpir. Ella rapidamente cerro la puerta con una ligera fuerza haciendo que quede un silenció inrremediablemente confuso en la habitación. ─ ¿Sigues ahí no madre? ─preguntó. Colocando una sonrisa en su rostro─. ¿Por que interrumpes los sueños de los demas? Y como si el pudiera ver detrás de las paredes la voz de Alessia respondió. ─ No queria interrumpir, pero queria despertarte para que puedas desayunar a gusto antes de marcharte. ─respondió─. Los padres de Kayla prepararon un desayuno especial para ti. ─ Puedes ir, en unos minutos estaremos desayunando con ustedes. El espero unos cuantos segundos hasta que se levanto sin pudor alguno aún estado desnudo abrió ligeramente la puerta confirmando que su madre no se encontraba ahí. Pero, al momento de voltear hacia mi me cubrí rapidamente evitando verlo sin ropa. ─ ¿Qué? ─pregunto. Divertido─. ¿Te sientes timida ahora? Asentí sin articular ni una sola palabra. Sin verme al espejo podia clarame

Desde que eramos dos pequeños sin saber nada de la vida, me había enamorado de ella. Me había aferrado a una idea de verla competir por el mismo caramelo millones de veces. Al volver a italia le rogue a mis padres volver a verla no sola una, millones de veces lo hice. Hasta que un dia la noticia de que mi compromiso con ella llegó a mis oidos, mi vida habia cambiado. En años lograria casarme con ella, iba a hacerlo. Segui todos sus movimientos a pensar de estar a millones de kilometros de distancia, me encargue de ver cada uno de sus progresos a distancia. Si, incluido en el momento que Esteban llegó a su vida. Sentía celos, unos celos mas enormes que el mismisimo planeta mismo, pero los contuve. Ella sería mia, no importaba cuantos hombres llegaran a su vida nosotros lograriamos estar juntos y me encargaria de que cada día sea una posibilidad de enamorarla. Y ahora, Lo había conseguido. Ella me habia dado la oportunidad que tanto habia esperado por años. No era por mi, sabia que

La noticia que habia vuelto habia de cierto modo armado un gran escandalo en la empresa. Durante todo este tiempo deje que Lucian y Scott se hicieran cargo mientras me encontraba con Kayla pero ahora debia de estar aca. ─ Señor ─Luca se acerco hacia mi, apareciendo de repente─. Es bueno tenerlo con nosotros. ─ Habla. El se colocó a nuestro lado sin intervenir en el camino de lucian y scott quienes venian uno de cada lado. ─ Señor como nos envió las ordenes tenemos todo listo con sus reuniones. ─confesó─. A primera hora vendran los inversionistas de Francia y a segunda hora los de Inglaterra. ─ Bien. Puedes irte. El no espero a que le dijera una sola palabra mas y se perdió de mi vista. ─ Bien. ─hable primero─ . Vamos q hacer esto de una buena vez. Camine recorriendo toda la empresa hacia el último piso donde se encontraban nuestras oficinas junto a las oficinas donde teniamos cada una de las reuniones mas importantes. Los empleados quienes parecian no haberme visto por años co