La semana fue muy agotadora con todo el trabajo y no ayudó mucho que estaba muy nerviosa por la cita con Derek, llamé al restaurante que he visto y pedí reservar el lugar entero para nosotros sería más íntimo y solo le diría a Derek que es una noche tranquila, también le dije que ese día iría a mi apartamento para prepararme, he pedido un vestido en una de mis tiendas favoritas y ya está en el apartamento.–Sé que tú me invitaste, pero ¿a qué hora paso por ti? –preguntó muy orgulloso, sin mencionar que me había alardeado toda la semana que lo había invitado a salir.–A las siete está bien –sonreí.–Muy bien, pasaré a las siete.

Me levanté con un dolor de cabeza terrible, Marine estaba a mi lado aún abrazándome, me deslicé de la cama para no despertarla y fui a lavarme la cara porque parecía un maldito mapache, me quite el vestido que aún tenía puesto y prepare un poco de café cuando Marine salió de la habitación. –Veo que ya te sientes mejor –se acercó.–No estás enojada, asustada o ya no quieres ser mi amiga –comenté dándole su café.–¿Por qué? –Preguntó oliendo el café antes de tomar un sorbo.–Por lo de la mentira –divague por si no lo recordaba.–O

No tenía muchas ganas de ir a trabajar, pero decidí hacerlo porque había tomado una decisión, la razón por la que había decidido quedarme la última vez fue por Derek, en mis locas alucinaciones creí que me amaba tanto como yo a él, lo que dijo Stacy anoche me dolio mucho, pero no soy de las que se queda lamentando y llorando por un hombre, soy Eliane Black y tengo que tomar mi propio camino. Llamé a mi hermano para decirle que regresaría, pero no iría a la mansión de mi madre, de ningún modo regresaría a ese lugar, le pedí que me diera mi dinero y buscaría mi propio lugar, me ha gustado mucho las finanzas y el hotel donde me he quedado me hizo sentir bien, todo eso me hizo pensar en una meta, así que al regresar aprovecharía todas mis habilidades e influencias para comp

Derek Evenson: Aún no sé si conocer a Lana fue lo mejor o lo peor que me haya pasado.Lana nunca lo supo, pero antes de entrar al restaurante ese día y hablar por primera vez, yo la había visto antes.Pasaba por ese restaurante para comprar algunas golosinas en una tienda al otro lado, prefería esa tienda porque caminar despejaba mi mente y podía regresar a la clínica con facilidad. Un día al pasar por el restaurante, la observé por la ventana, era tan hermosa con su cabello rojizo y fino rostro, esa sonrisa que iluminaba todo, contuve mi impulso de entrar y hablar con ella como un idiota. Necesitaba un motivo para acercarme. Leer más