Narra Kiara.- Papá - Sonrió al sentirme entre los brazos de mi padre y le correspondo el abrazo.- ¿Estas bien? - Cuestiono separándose de mi y observándome.- Si - Asentí sonriendo - Mira, el es Javier, Javier el es mi padre - Los presente.- Hola pequeño - Saludo mi padre poniéndose a la altura de Javier.- Hola señor - lo saludo de regreso.- Yo creó que me merezco que me llames Abuelo - Hablo mi padre sonriendo.- ¿Puedo llamarlo así? - Cuestiono el niño sonriendo.- Claro - sonríe cargandolo.- Kiara - Siento la voz de Owen y giró a verlo.- Hola - Lo salude cuando el me abrazo.Más tarde me encontraba sentada en una cascada y en plena Soledad.- Estas muy pensativa - Siento la voz de Lucas y giro mi cabeza para verlo.- Lo estoy - Afirmé al mism

Narra Kiara.- Princesa - Siento un murmullo y despierto para encontrarme a una de las mucamas.- ¿Si? - Cuestione aún adormilada.- Han pedido que no le dijera pero...La manada del rey Connor ha sido atacada y por lo que informaron el esta gravemente herido por plata - me informó, extrañamente mi corazón se estrujó al oír eso.- Yo...yo - No sabía que decir - No es asunto mío - Respondí luego de un rato - Ahora vete - Le pedí sin verla, ella hizo una reverencia y se marchó, me recosté en mi cama con un nudo en la garganta y traté de conciliar el sueño sin obtener resultados, luego de un rato no aguanté más y fui ponerme ropa para salir de mi habitación.- ¿Donde vas? - Cuestiono Owen que estaba abajo.- Supe del ataque a Connor - Le contesté dirigiéndome a la puerta, el me tomó del brazo y me detuvo.- No vas a ir Kiara, las cosas están muy comp

Narra Kiara.- ¿Ellas fueron las que pusieron la carta entre mis cosas? - Cuestione sorprendida mirando a Samuel.- Si - Afirmo el con una mueca.- Pedazos de...lo siento - me disculpo al notar que estaba apunto de decir una grosería delante de el.- Tranquila - Me sonríe - Es entendible  - Samuel era el hombre más amable y comprensivo que había conocido.Más tarde me encontraba sentada junto a Connor.- ¿Aún te sientes mal? - Cuestione mirándolo.- Ya no tanto - Sonríe.- Que bueno porque tengo que..- Mis palabras fueron interrumpidas puesto que un guardia entró apresuradamente.- Reina - Hizo una reverencia - Han mandado a buscarla del reino de los vampiros, el castillo de su padre esta siendo atacado - me informó, me puse de pie inmediatamente y salí corriendo, tomé mi camioneta y conduje a todo lo que daba

Narra Kiara.- Kiara Wells, hoy bajo la presencia de  todos los vampiros te pregunto, ¿Aceptas ser la nueva emperadora de los vampiros como la sucesora de Felipe Wells? - Cuestiono mi abuelo, estábamos en el gran jardín del castillo bajo la atenta mirada de miles de vampiros, era mi coronación.- Acepto prometiendo cuidar de todos y hacer justicia por la muerte de nuestro antiguo rey, del príncipe Owen y de todos los que perdieron la vida en la batalla contra los cazadores - Mi abuelo sonrió y puso la Corona que era de mi madre sobre mi cabeza.- Aquí con todos nosotros esta la nueva reina - Proclama mi abuelo, los aplausos no se hicieron esperar y suspiré con un nudo en la garganta.Tenemos que descubrir quién los mató - Recuerda Alondra.Lo sé - respondí.Hace un rato hablé con el lobo de

Narra Kiara.Habia pasado una semana y me encontraba observando en el campo de entrenamiento a lobos y vampiros compartiendo conocimientos sobre ataques.- Es genial lo bien que se llevan - Siento la voz de Lucas junto a mi.- Si, lo es - Afirme.- Yo quería hablar contigo sobre...- En ese momento llegó Connor con expresión seria.- Vete a dirigir el entrenamiento Lucas - Le pidió serio, Lucas tenso la mandíbula sin embargo le hizo caso y se fue - ¿De qué hablaban? - Cuestiono mirándome.- No es de tú incumbencia - Respondí tajante y viendo hacía el campo de entrenamiento.- Por supuesto que es de mi incumbencia - respondió el.- ¿No me digas que estás celoso? - Lo provoqué acercándome a él, el trago saliva y me observó a los ojos.- Estoy jodidamente celoso - Respondio serio.- Si quieres te estaré

Narra Kiara.Al día siguiente me encontraba en el despacho resolviendo un par de cosas de la empresa cuando sentí el sonido de la puerta.- Adelante - Exclamé, por la puerta no tardó en pasar Alessandro Berlusconi.- Buenos día, Reina - me saludo sonriendo.- Hola Alessandro - lo saludé sonriendo.- ¿Cómo está todo por aquí? - cuestiona sentándose frente a mi.- Hasta ahora bien, los ataques han parado - Comenté.- He tenido noticias al respecto - Contestó el.- ¿Y qué te trae por aquí? - Cuestioné.- Tenía ganas de verte - Me guiñó un ojo.- Alessandro - Reí negando.- Esta bien, lo siento - Se disculpó sonriendo - ¿y qué tal ha ido todo con el chucho? - Cuestiona.- No le llames así, te recuerdo que este lugar ahora es un hogar de lobos también - Mencioné seria - Y

Narra Kiara.Sentía algo de calor así que comencé a removerme entre los brazos protectores de alguien, al abrir los ojos fruncí el ceño.- ¿Que haces tú aquí? - Cuestioné molesta y alejándome de Connor que al oírme despertó.- Lo siento, no fue mi intención molestarte - contesto adormilado - Solo te sentí tan cálida que no fui capaz de irme a mi vacío y frío cuarto - Murmuró mirándome.- Ajá, claro - Ruedo mis ojos poniéndome de pie y caminando al baño.- Eres una gruñona - al oír eso me gire y lo observé.- ¿Y que? ¿Tienes problemas con eso? - cuestionó alzando una ceja.- Te ves muy sexy así - Se acercó a mí, me sonroje por aquello.- ¿Ah sí? - cuestioné fingiendo indiferencia.- Mucho y eso me pone muy caliente - Me tomo de la cintura acercando mi cuerpo al suyo.- Entonces vas a tener que ir por

Narra Kiara.Me encontraba apunto de dormir cuando sentí la alarma de ataques activarse, me levanté con rapidez y salí corriendo a buscar a Javier a su habitación.- ¡Javier! - exclame entrando, el estaba en un rincón asustado - Ven, iré a dejarte con Samuel e Ismael - Lo cargué y corrí a buscar a el mayor de los Wellington, sin embargo no alcancé a llegar cuando un hombre se cruzó en mi camino - ¿Quien eres y como tienes la osadía de atacar mi reino? - cuestionó Alondra tomando el control de mi cuerpo.- Así que la reina y su bastardo - Se burló, mis ojos rápidamente se pusieron rojos al oír como se refería a mi pequeño, en eso sentí el pecho dolerme con fuerza, sin embargo me mantuve en pie y dejando a Javier en el piso, inicié una batalla contra el cazador, que pronto acabó con el muerto.- Reina - Exclamó un guardia apareciendo - El rey fue atacado y esta